Cada año, Larry Fink, CEO de BlackRock, publica una carta dirigida a inversores, líderes empresariales y responsables de políticas públicas. Su relevancia radica en que BlackRock administra más de 10 billones de dólares en activos (cifra al cierre de 2024), por lo que sus opiniones no solo reflejan el pensamiento de una de las instituciones de gran influencia en el mundo financiero, sino que también tienen la capacidad de orientar estrategias de inversión, influir en agendas empresariales y marcar tendencias globales.

En 2025, se centra en la transformación del mercado financiero a través de la democratización de las inversiones, la evolución en la gestión de carteras y la adopción de nuevas tecnologías como la tokenización. Frente a un panorama global marcado por la incertidumbre económica y el proteccionismo, BlackRock defiende la expansión del acceso a los mercados como una vía para generar estabilidad y crecimiento a largo plazo.

A continuación, se presentan los puntos clave del documento. También se recogen en este análisis exclusivo para empresas Corporate Excellence.

Crítica al proteccionismo y defensa del capitalismo inclusivo

• La carta señala que el crecimiento de la desigualdad económica ha llevado al resurgimiento de políticas proteccionistas en distintos países, lo que frena la cooperación y el desarrollo global. Destaca la existencia de “economías gemelas e invertidas”, donde una parte de la sociedad acumula riqueza mientras otra enfrenta dificultades estructurales.
• Como respuesta, BlackRock apuesta por un capitalismo más inclusivo, promoviendo el acceso equitativo a oportunidades de inversión como herramienta para reducir las desigualdades.

Democratización de los mercados privados

• Uno de los principales ejes aborda la necesidad de ampliar el acceso a los mercados privados, que incluyen infraestructuras como centros de datos, puertos y redes eléctricas. Estos activos han estado tradicionalmente reservados para grandes instituciones y patrimonios de alto valor.
• BlackRock informa que ha invertido 30.000 millones de dólares en el último año con el objetivo de facilitar el acceso de sus clientes a estos mercados, impulsando una mayor diversificación y equidad en las oportunidades de inversión.

Transformación en la estructura de las carteras de inversión

• Se propone una evolución en la asignación tradicional de activos. La estrategia convencional de 60% en acciones y 40% en bonos podría dar paso a una nueva distribución de 50% en acciones, 30% en bonos y 20% en activos privados. Este cambio busca mejorar la rentabilidad a largo plazo y reforzar la estabilidad de las inversiones, integrando nuevas fuentes de retorno y diversificación.

La tokenización de activos como nueva frontera financiera

• Otro de los aspectos destacados de la carta es la tokenización de activos, es decir, la conversión de bienes físicos en tokens digitales negociables. Según BlackRock, esta innovación tiene el potencial de transformar el sistema financiero al agilizar transacciones, reducir costos y eliminar intermediarios.
• La implementación de la tokenización permitiría liberar grandes volúmenes de capital actualmente inmovilizados por retrasos en los procesos de liquidación, favoreciendo el crecimiento económico.

Nuevas estrategias para la jubilación y generación de ingresos

• La carta también pone énfasis en la necesidad de redefinir los modelos de inversión para la jubilación, especialmente en un contexto de mayor longevidad y desafíos en los sistemas tradicionales de pensiones.
• Fink aboga por facilitar el acceso a inversiones que generen ingresos estables y predecibles, combinando esfuerzos del sector público y privado con un enfoque en educación financiera.

Un enfoque centrado en la inversión como herramienta de progreso

• El documento subraya que la inversión no es solo un mecanismo financiero, sino una herramienta clave para impulsar el crecimiento y la estabilidad económica. A través de la democratización de los mercados y la innovación financiera, BlackRock busca ampliar la base de inversionistas y fortalecer la confianza en el sistema económico.