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08 noviembre, 2023
Un desafío compartido por las organizaciones: la necesidad de métricas
La reputación, como variable estratégica, juega un importante papel en la toma de decisiones de las organizaciones y ocupa un lugar cada vez más relevante en la agenda de la alta dirección. El avance de la importancia de los intangibles en la gestión empresarial pasa por la generación de confianza hacia los mismos por parte de los directivos de las compañías. En este sentido, cada vez son más necesarias herramientas y soluciones prácticas a los problemas derivados de la naturaleza no financiera de los intangibles.
La International Reputation Week, organizada en octubre de 2023 por Corporate Excellence y la Universidad de Navarra en Madrid, permitió elaborar una serie conclusiones que compilamos como aprendizajes de extraordinario valor para los gestores de intangibles. Entre estos, destaca la reflexión sobre uno de los principales retos compartidos por los profesionales del sector: la necesidad de métricas que permitan una mejor gestión de intangibles y refuercen la presencia y autoridad de sus gestores en los cuadros directivos.
Una de las claves del éxito de la gestión corporativa reside en la transversalidad, en una toma de decisiones certera y asentada sobre información valiosa de todos los ámbitos de la organización. Los tradicionales indicadores financieros siguen teniendo un rol fundamental en estos procesos de decisión, pero ahora se suman a ellos indicadores no financieros o intangibles.
El secreto del éxito de la presencia de los indicadores no financieros en estos procesos está en su retroalimentación con los tradicionales indicadores financieros, ya que permite una visión completa, veraz y profunda de la realidad de la compañía, allanando el camino a una toma de decisiones segura. Solo a través de esta retroalimentación y convivencia, los indicadores no financieros pueden ser considerados con el mismo nivel de rigurosidad e influencia por parte de la alta dirección de las compañías.
Para encarar este desafío de integrar completamente los intangibles en la toma de decisiones de negocio se precisan nuevos recursos, siendo el más importante el talento. Las organizaciones necesitan profesionales con inteligencia social, que entiendan el entorno y sepan leer y analizar profundamente el contexto externo e interno de sus corporaciones. Estos profesionales deben ser expertos de brillante cualificación en la gestión de los intangibles, ya que solo a través de la excelencia de su trabajo serán capaces de avanzar e impulsar la transformación de sus compañías hacia un siguiente nivel de éxito.
Estos profesionales que las organizaciones necesitan precisan a su vez de herramientas para llevar a cabo su tarea de gestión. Así, son imprescindibles indicadores, modelos y herramientas de gestión destinadas a demostrar el impacto de la reputación y los intangibles en el negocio y vincularlos a los indicadores financieros tradicionales. Conviene recordar que estudios como Approaching the Future muestran que la principal inquietud de los inversores a la hora de adoptar políticas de intangibles –como por ejemplo la sostenibilidad– tiene que ver con la calidad de los datos.
En el contexto empresarial actual, los datos y las métricas son una herramienta fundamental para que los intangibles permitan la creación de valor a largo plazo y la mitigación de riesgos. Para facilitar a la alta dirección una toma de decisiones que considere los indicadores intangibles, resulta imprescindible la investigación y el desarrollo de métricas e indicadores para gestionar intangibles clave de la organización como la reputación o la marca corporativa.
El cambio de paradigma en torno a la importancia concedida a los intangibles por parte de las organizaciones es innegable y se ve refrendado por múltiples estudios que muestran que el éxito depende de la confianza que estas son capaces de generar en sus grupos de interés. Para conseguirlo, necesitan una reputación corporativa positiva que active comportamientos favorables por parte de sus stakeholders. Sin embargo, este cambio de paradigma hacia la economía de la reputación coexiste con la primacía del dato como principal valor de decisión. Reputación y métricas son, por tanto, una alianza imprescindible para el éxito corporativo y su desarrollo la gran prioridad –y a la vez, oportunidad– de los profesionales.
Esta reflexión se une a los aprendizajes y conclusiones de la International Reputation Week que hemos compilado para ti desde nuestro compromiso con la mejora y la profesionalización de la gestión de intangibles. ¡Descárgalo aquí y refuerza tus conocimientos sobre gestión reputacional!